La Lenteja Pardina es una lenteja pequeña, de entre 3 y 5 mm.
El color de su piel es marrón tierra oscuro con pequeños puntitos negros.
Una vez cocida presenta una piel muy fina casi inapreciable, y se conserva entera y sin perder su hollejo.
Son ricas en hidratos de carbono, hierro y fósforo.
Es especialmente adecuada para utilizarse en platos como ensaladas, pastas, potes de legumbres y todo tipo de platos de la cocina mediterránea.